Descripción: La Gestión del Ciclo de Vida de Aplicaciones (ALM, por sus siglas en inglés) es el proceso de gestionar el ciclo de vida de una aplicación desde su desarrollo hasta su retiro. Este enfoque integral abarca varias etapas, incluyendo la planificación, el desarrollo, las pruebas, la implementación, el mantenimiento y la eventual desactivación de la aplicación. ALM no solo se centra en el desarrollo de software, sino que también incluye la gestión de requisitos, la gestión de cambios y la colaboración entre equipos. A través de herramientas y metodologías adecuadas, ALM busca optimizar la calidad del software, reducir el tiempo de comercialización y mejorar la satisfacción del cliente. La implementación de ALM permite a las organizaciones adaptarse rápidamente a los cambios del mercado y a las necesidades de los usuarios, garantizando que las aplicaciones se mantengan relevantes y funcionales a lo largo de su vida útil. Además, la gestión del ciclo de vida de aplicaciones se apoya en prácticas como DevOps y Agile, que fomentan la colaboración y la integración continua entre los equipos de desarrollo y operaciones, facilitando así una entrega más rápida y eficiente de software.
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