Descripción: La Política de Bots se refiere a un conjunto de directrices diseñadas para gestionar el tráfico de bots en redes y sistemas, así como para prevenir abusos que puedan comprometer la seguridad y la integridad de los mismos. En el contexto de la seguridad en IoT (Internet de las Cosas), estas políticas son cruciales, ya que los dispositivos conectados son vulnerables a ataques automatizados que pueden llevar a la explotación de datos sensibles o a la interrupción de servicios. Las políticas de bots establecen criterios para identificar y clasificar el tráfico de bots, diferenciando entre aquellos que son benignos, como los motores de búsqueda, y los maliciosos, que pueden realizar scraping de datos, ataques DDoS o intentos de acceso no autorizado. Estas directrices también pueden incluir medidas de mitigación, como la implementación de CAPTCHAs, la limitación de la tasa de solicitudes y el uso de firewalls específicos para bots. La relevancia de estas políticas radica en su capacidad para proteger tanto a los usuarios como a los sistemas de las amenazas emergentes en un entorno cada vez más interconectado, donde la proliferación de dispositivos IoT aumenta la superficie de ataque y la complejidad de la gestión de la seguridad.