Descripción: La memoria base en entornos de virtualización se refiere a la cantidad de RAM asignada a una máquina virtual. Esta memoria es crucial para el rendimiento y la funcionalidad de la máquina virtual, ya que determina cuántos recursos del sistema host se pueden utilizar. Al configurar una máquina virtual, el usuario debe seleccionar la cantidad de memoria que se le asignará, lo que influye directamente en la capacidad de la máquina virtual para ejecutar aplicaciones y procesos. Una asignación insuficiente de memoria puede resultar en un rendimiento lento y en la incapacidad de ejecutar software que requiere más recursos, mientras que una asignación excesiva puede afectar el rendimiento del sistema host. La memoria base se mide en megabytes (MB) o gigabytes (GB) y debe ser equilibrada cuidadosamente para optimizar tanto la máquina virtual como el sistema operativo anfitrión. Además, muchas plataformas de virtualización permiten ajustar la memoria base en cualquier momento, lo que proporciona flexibilidad para adaptarse a diferentes necesidades de uso y carga de trabajo. Esta característica es especialmente útil en entornos de desarrollo y pruebas, donde los requisitos de memoria pueden variar significativamente.
