Descripción: Un tumor benigno es un crecimiento no canceroso que no se propaga a otras partes del cuerpo. A diferencia de los tumores malignos, que son cancerosos y pueden invadir tejidos circundantes y metastatizar, los tumores benignos suelen ser encapsulados y limitados a un área específica. Estos tumores pueden desarrollarse en cualquier parte del cuerpo y, aunque generalmente no representan una amenaza para la vida, pueden causar problemas dependiendo de su tamaño y ubicación. Por ejemplo, un tumor benigno en el cerebro puede ejercer presión sobre estructuras cerebrales vitales, provocando síntomas neurológicos. Los tumores benignos pueden ser asintomáticos y ser descubiertos incidentalmente durante estudios de imagen realizados por otras razones. En términos de tratamiento, la extirpación quirúrgica es a menudo suficiente para eliminar un tumor benigno, y la mayoría de las veces, no hay necesidad de tratamientos adicionales como la quimioterapia o la radioterapia. La clasificación de los tumores benignos incluye varios tipos, como lipomas (tumores de tejido adiposo), adenomas (tumores glandulares) y fibromas (tumores de tejido fibroso), entre otros. La identificación y el diagnóstico precisos son cruciales para determinar el enfoque adecuado para el manejo de estos crecimientos, asegurando así la salud y el bienestar del paciente.