Descripción: El forense de datos es el proceso de recopilar, preservar y analizar datos para investigar y resolver delitos cibernéticos. Este campo combina técnicas de investigación criminal con conocimientos técnicos en informática y redes. Su objetivo principal es recuperar información de dispositivos digitales, como computadoras, teléfonos móviles y servidores, que puede ser crucial para entender la naturaleza de un delito, identificar a los perpetradores y proporcionar pruebas en un tribunal. El forense de datos se basa en principios rigurosos para garantizar que la evidencia sea válida y admisible en procedimientos legales. Esto incluye la creación de copias forenses de los datos originales para evitar alteraciones y la utilización de herramientas especializadas para el análisis. La importancia del forense de datos ha crecido exponencialmente con el aumento de los delitos cibernéticos, convirtiéndose en una disciplina esencial para las fuerzas del orden, empresas de seguridad y organizaciones que buscan proteger su información y activos digitales.
Historia: El forense de datos comenzó a tomar forma en la década de 1980 con el auge de la computación personal y el acceso a dispositivos digitales. Uno de los hitos importantes fue el desarrollo de herramientas de análisis forense, como EnCase, en 1998, que permitió a los investigadores examinar discos duros de manera más efectiva. A medida que la tecnología avanzaba, también lo hacían las técnicas de forense digital, adaptándose a nuevas amenazas y tipos de dispositivos. En la década de 2000, el forense de datos se consolidó como una disciplina profesional, con la creación de certificaciones y estándares específicos para los profesionales del área.
Usos: El forense de datos se utiliza principalmente en investigaciones criminales para recuperar y analizar evidencia digital relacionada con delitos como el fraude, el robo de identidad y el acoso cibernético. También se aplica en el ámbito corporativo para investigar violaciones de seguridad, fraudes internos y para garantizar el cumplimiento de normativas. Además, se utiliza en litigios legales para proporcionar pruebas digitales en casos civiles y penales.
Ejemplos: Un ejemplo de forense de datos es la investigación del caso de la violación de datos de Target en 2013, donde se analizaron los sistemas para determinar cómo se accedió a la información de los clientes. Otro caso notable es el de la investigación del hackeo de Sony Pictures en 2014, donde se utilizaron técnicas de forense digital para identificar a los responsables y entender el alcance del ataque.