Descripción: La gestión de recursos del núcleo se refiere a la asignación y administración de los recursos del sistema operativo por parte del núcleo (kernel). Este componente fundamental actúa como intermediario entre el hardware y el software, garantizando que los recursos del sistema, como la CPU, la memoria y los dispositivos de entrada/salida, se utilicen de manera eficiente y equitativa. La gestión de recursos incluye la planificación de procesos, la gestión de la memoria, el manejo de interrupciones y la comunicación entre procesos. A través de algoritmos de planificación, el núcleo decide qué procesos deben ejecutarse en qué momento, optimizando el rendimiento del sistema y asegurando que las tareas se completen de manera oportuna. Además, la gestión de la memoria implica la asignación de bloques de memoria a diferentes procesos y la liberación de memoria no utilizada, lo que es crucial para evitar fugas de memoria y garantizar la estabilidad del sistema. La capacidad del núcleo para gestionar estos recursos de manera efectiva es esencial para el funcionamiento de sistemas operativos modernos y para servidores, ya que permite la multitarea y la ejecución simultánea de múltiples aplicaciones, mejorando la experiencia del usuario y la eficiencia general del sistema.
