Descripción: Un servidor KVM (Keyboard, Video, Mouse) es un dispositivo que permite a los administradores de sistemas acceder y controlar múltiples servidores desde una única consola. Este tipo de servidor proporciona una interfaz que combina las funciones de teclado, video y ratón, facilitando la gestión remota de servidores físicos. Los servidores KVM son esenciales en entornos de centros de datos, donde se requiere un control eficiente y centralizado de múltiples máquinas. A través de una conexión KVM, los usuarios pueden interactuar con diferentes servidores sin necesidad de estar físicamente presentes en el lugar, lo que ahorra tiempo y recursos. Además, muchos servidores KVM modernos ofrecen características avanzadas como la capacidad de acceder a los servidores a través de la red, lo que permite la gestión remota incluso cuando el sistema operativo no está funcionando. Esto es especialmente útil para la resolución de problemas y el mantenimiento de servidores. En resumen, un servidor KVM es una herramienta crucial para la administración de infraestructuras de TI, proporcionando un acceso eficiente y versátil a múltiples sistemas desde una única ubicación.
Historia: El concepto de KVM se originó en la década de 1990 con el desarrollo de dispositivos que permitían la conmutación entre múltiples computadoras utilizando un solo conjunto de periféricos. A medida que la tecnología avanzó, los KVM evolucionaron para incluir capacidades de acceso remoto, permitiendo a los administradores gestionar servidores de forma más eficiente. En 1999, se introdujeron los KVM sobre IP, que permitieron el acceso a servidores a través de redes, lo que revolucionó la forma en que se gestionaban los centros de datos.
Usos: Los servidores KVM se utilizan principalmente en centros de datos para la gestión remota de servidores. Permiten a los administradores realizar tareas de mantenimiento, solucionar problemas y configurar sistemas sin necesidad de estar físicamente presentes. También son útiles en entornos de desarrollo y pruebas, donde se requiere acceso a múltiples máquinas para realizar pruebas de software.
Ejemplos: Un ejemplo de uso de un servidor KVM es en un centro de datos donde un administrador puede gestionar varios servidores de aplicaciones desde una única consola. Otro ejemplo es en empresas que utilizan KVM sobre IP para acceder a sus servidores de forma remota, permitiendo la administración de sistemas en diferentes ubicaciones geográficas.