Descripción: La baja memoria se refiere a una cantidad limitada de memoria disponible para aplicaciones, lo que a menudo conduce a problemas de rendimiento. Este fenómeno se presenta cuando el sistema operativo no puede asignar suficiente memoria a los procesos en ejecución, lo que puede resultar en una disminución de la velocidad de respuesta y en la incapacidad de ejecutar múltiples aplicaciones simultáneamente. La baja memoria puede ser causada por diversas razones, como la ejecución de aplicaciones que requieren grandes cantidades de recursos, la falta de memoria física en el dispositivo o la fragmentación de la memoria. En sistemas modernos, la gestión de la memoria es crucial para garantizar un rendimiento óptimo. Los sistemas operativos utilizan técnicas como la paginación y la segmentación para manejar la memoria de manera eficiente, pero cuando la memoria disponible es escasa, estas técnicas pueden no ser suficientes. La baja memoria no solo afecta a dispositivos de gama baja, sino que también puede ser un problema en sistemas más potentes si no se gestionan adecuadamente las aplicaciones y los procesos. En resumen, la baja memoria es un desafío significativo en la gestión de recursos en sistemas tecnológicos, y su impacto puede ser notorio en la experiencia del usuario, limitando la capacidad de realizar tareas de manera fluida y eficiente.