Descripción: La aversión a la pérdida es un concepto psicológico que describe la tendencia de las personas a preferir evitar pérdidas en lugar de adquirir ganancias equivalentes. Este fenómeno se basa en la idea de que las pérdidas tienen un impacto emocional más fuerte que las ganancias de la misma magnitud. En el contexto financiero, esta aversión puede influir en las decisiones de inversión, donde los inversores pueden ser reacios a vender activos que han perdido valor, incluso si las perspectivas a largo plazo son positivas. La aversión a la pérdida puede llevar a comportamientos como la ‘inercia de inversión’, donde los individuos mantienen activos en declive en un intento de evitar realizar una pérdida, lo que puede resultar en decisiones subóptimas. Este sesgo cognitivo también puede manifestarse en la forma en que los inversores reaccionan ante la volatilidad del mercado, donde las fluctuaciones de precios pueden provocar miedo y ansiedad, llevando a decisiones impulsivas. En resumen, la aversión a la pérdida es un factor crucial que afecta el comportamiento de los inversores, moldeando sus decisiones y estrategias de inversión en diversas clases de activos.