Descripción: La mantenibilidad se refiere a la facilidad con la que un sistema de software puede ser modificado para corregir fallos, mejorar el rendimiento o adaptarse a un entorno cambiado. Este concepto es fundamental en el desarrollo de software, ya que un código mantenible permite a los desarrolladores realizar cambios de manera eficiente y con un menor riesgo de introducir nuevos errores. La mantenibilidad se ve influenciada por varios factores, incluyendo la claridad del código, la estructura del mismo y la documentación asociada. Un código limpio, que sigue principios de diseño y buenas prácticas, es más fácil de entender y modificar. La revisión de código es una práctica que ayuda a identificar problemas de mantenibilidad antes de que el código se integre en la base de código principal, permitiendo a los equipos detectar y corregir problemas de diseño o implementación. La refactorización, por otro lado, es el proceso de reestructurar el código existente sin cambiar su funcionalidad externa, lo que mejora su legibilidad y reduce la complejidad. En resumen, la mantenibilidad es un aspecto crítico que impacta directamente en la calidad del software y en la eficiencia del equipo de desarrollo a lo largo del ciclo de vida del producto.