Descripción: El ‘Pedido Mínimo’ se refiere a la cantidad más pequeña de productos que un cliente debe comprar en una transacción. Este concepto es fundamental en el comercio electrónico, donde los vendedores pueden establecer un límite mínimo para optimizar sus operaciones. La implementación de un pedido mínimo puede ayudar a reducir costos de envío, mejorar la rentabilidad y asegurar que las transacciones sean viables desde un punto de vista económico. Además, este requisito puede incentivar a los clientes a comprar más productos, aumentando así el valor promedio de los pedidos. Los administradores de tiendas en plataformas de comercio electrónico pueden configurar fácilmente esta opción a través de ajustes en la configuración del sistema, permitiendo personalizar la experiencia de compra según las necesidades del negocio. El pedido mínimo no solo beneficia a los vendedores, sino que también puede ofrecer a los clientes una experiencia de compra más satisfactoria al asegurar que obtienen un valor adecuado por su dinero. En resumen, el ‘Pedido Mínimo’ es una estrategia clave en el comercio electrónico que busca equilibrar la satisfacción del cliente con la viabilidad económica del vendedor.