Seguridad Externalizada

Descripción: La seguridad externalizada se refiere a la práctica de contratar a proveedores externos para gestionar y proporcionar servicios de seguridad, en lugar de depender de un equipo interno. Este enfoque permite a las organizaciones acceder a expertos en ciberseguridad, herramientas avanzadas y tecnologías de protección sin la necesidad de invertir en infraestructura propia. La seguridad externalizada abarca una variedad de servicios, incluyendo la monitorización de redes, la gestión de incidentes, la respuesta a amenazas y la auditoría de seguridad. Al externalizar estas funciones, las empresas pueden beneficiarse de una mayor eficiencia, ya que los proveedores especializados suelen tener experiencia en la identificación y mitigación de riesgos. Además, permite a las organizaciones concentrarse en su actividad principal, dejando la seguridad en manos de expertos. Este modelo es especialmente relevante en un entorno digital en constante evolución, donde las amenazas cibernéticas son cada vez más sofisticadas y frecuentes. La seguridad externalizada no solo ayuda a reducir costos operativos, sino que también mejora la capacidad de respuesta ante incidentes, ya que los proveedores suelen contar con recursos y tecnologías que pueden no estar disponibles internamente.

Historia: La seguridad externalizada comenzó a ganar popularidad en la década de 1990, cuando las empresas comenzaron a reconocer la importancia de la ciberseguridad en un mundo cada vez más digitalizado. A medida que las amenazas cibernéticas se volvieron más complejas, muchas organizaciones optaron por externalizar sus necesidades de seguridad a proveedores especializados. En los años 2000, el crecimiento de Internet y la proliferación de dispositivos conectados llevaron a un aumento en la demanda de servicios de seguridad externalizados, lo que resultó en la creación de numerosas empresas dedicadas exclusivamente a esta área. Eventos significativos, como el ataque a las Torres Gemelas en 2001 y la crisis de seguridad de datos en empresas como Target y Equifax, subrayaron la necesidad de una ciberseguridad robusta, impulsando aún más la externalización de estos servicios.

Usos: La seguridad externalizada se utiliza principalmente en empresas que buscan mejorar su postura de seguridad sin incurrir en los costos de mantener un equipo interno. Es común en sectores como la banca, la salud y el comercio electrónico, donde la protección de datos sensibles es crucial. Las organizaciones pueden externalizar funciones como la monitorización de seguridad, la gestión de incidentes, la respuesta a amenazas y la auditoría de cumplimiento. Además, muchas empresas recurren a la seguridad externalizada para cumplir con regulaciones y estándares de seguridad, como el GDPR o PCI DSS, que requieren medidas de protección específicas.

Ejemplos: Un ejemplo de seguridad externalizada es el uso de servicios de empresas como McAfee o Symantec, que ofrecen soluciones de ciberseguridad a organizaciones de diversos tamaños. Otro caso es el de empresas que contratan a proveedores de servicios gestionados de seguridad (MSSP) para la monitorización continua de sus redes y sistemas. Por ejemplo, una empresa de comercio electrónico puede externalizar su gestión de seguridad a un MSSP que se encargue de detectar y responder a amenazas en tiempo real, permitiendo a la empresa centrarse en su negocio principal.

  • Rating:
  • 0

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

PATROCINADORES

Glosarix en tu dispositivo

instalar
×
Enable Notifications Ok No