Descripción: El desplazamiento al rojo de quásar es una medida de cuánto se ha estirado la luz de un quásar debido a la expansión del universo. Este fenómeno se observa cuando la luz emitida por un quásar, que es un tipo de objeto astronómico extremadamente luminoso y distante, se desplaza hacia longitudes de onda más largas, es decir, hacia el rojo del espectro electromagnético. Este desplazamiento es un indicativo de que el quásar se está alejando de nosotros, lo que se interpreta como una evidencia de la expansión del universo. Cuanto mayor es el desplazamiento al rojo, mayor es la distancia del quásar y, por ende, más antiguo es el objeto observado. Este concepto es fundamental en la cosmología moderna, ya que permite a los astrónomos calcular la velocidad a la que se alejan los objetos celestes y, por lo tanto, entender mejor la historia y la evolución del universo. El desplazamiento al rojo no solo se aplica a los quásares, sino también a galaxias y otros cuerpos celestes, convirtiéndose en una herramienta esencial para la medición de distancias astronómicas y la comprensión de la estructura del cosmos.
Historia: El concepto de desplazamiento al rojo fue introducido en el contexto de la astronomía en la década de 1920, cuando Edwin Hubble observó que las galaxias se alejaban de la Tierra, lo que llevó a la formulación de la ley de Hubble. Sin embargo, el estudio específico de los quásares comenzó en la década de 1960, cuando se identificaron como objetos extremadamente luminosos y distantes. El primer quásar, 3C 273, fue descubierto en 1963 por Maarten Schmidt, quien también midió su desplazamiento al rojo, confirmando que se encontraba a miles de millones de años luz de distancia. Este descubrimiento revolucionó la comprensión de la estructura del universo y la evolución de los objetos astronómicos.
Usos: El desplazamiento al rojo de quásar se utiliza principalmente en cosmología para determinar la distancia y la velocidad de recesión de los quásares y otros objetos celestes. Al medir el desplazamiento al rojo, los astrónomos pueden inferir la expansión del universo y estudiar la distribución de la materia en el cosmos. Además, se utiliza para investigar la formación y evolución de las galaxias, así como para entender fenómenos como la energía oscura y la materia oscura.
Ejemplos: Un ejemplo notable del uso del desplazamiento al rojo es el quásar 3C 273, que tiene un desplazamiento al rojo de aproximadamente 0.158, lo que indica que se encuentra a una distancia de aproximadamente 2.5 mil millones de años luz. Otro ejemplo es el quásar APM 08279+5255, que tiene un desplazamiento al rojo de 3.9, lo que lo convierte en uno de los quásares más distantes conocidos, situado a más de 12 mil millones de años luz de la Tierra.