Descripción: Un sensor de suministro de gas es un dispositivo diseñado para monitorear y medir los niveles de gas en un entorno específico. Estos sensores son fundamentales en la detección de fugas de gas, garantizando la seguridad en hogares, industrias y espacios públicos. Funcionan mediante la utilización de tecnologías avanzadas que permiten la identificación de diferentes tipos de gases, como el metano, propano y dióxido de carbono. Los sensores de suministro de gas están equipados con componentes electrónicos que convierten las variaciones en la concentración de gas en señales eléctricas, las cuales pueden ser procesadas y analizadas. Además, muchos de estos dispositivos están integrados en sistemas de IoT (Internet de las Cosas), lo que les permite enviar datos en tiempo real a plataformas de monitoreo, facilitando la gestión y respuesta ante posibles incidentes. La relevancia de estos sensores radica en su capacidad para prevenir accidentes, proteger la salud de las personas y minimizar el impacto ambiental. Su diseño compacto y su facilidad de instalación los hacen ideales para una amplia gama de aplicaciones, desde el monitoreo en cocinas hasta sistemas de seguridad en instalaciones industriales.
