Descripción: El comportamiento estacional en los pandas se refiere a los cambios en sus patrones de actividad y hábitos a lo largo de las diferentes estaciones del año. Estos cambios son influenciados por factores ambientales como la temperatura, la disponibilidad de alimentos y la luz solar. Durante la primavera y el verano, los pandas suelen ser más activos, aprovechando la abundancia de brotes y hojas tiernas, que son su principal fuente de alimento. En contraste, durante el otoño e invierno, su actividad puede disminuir, ya que las temperaturas más frías y la escasez de alimentos pueden llevar a un comportamiento más sedentario. Además, los pandas pueden modificar sus áreas de forrajeo y sus patrones de movimiento en función de la disponibilidad de bambú, su alimento preferido. Este comportamiento estacional no solo es crucial para su supervivencia, sino que también tiene implicaciones en su reproducción, ya que las hembras suelen entrar en celo en un período específico del año, lo que coincide con las condiciones ambientales más favorables. Comprender el comportamiento estacional de los pandas es esencial para su conservación, ya que permite a los investigadores y conservacionistas desarrollar estrategias adecuadas para proteger su hábitat y garantizar su bienestar en entornos naturales y en cautiverio.