Descripción: La transitoriedad se refiere al estado de durar solo por un corto tiempo, encapsulando la idea de lo efímero y lo pasajero. Este concepto se manifiesta en diversas áreas de la vida, desde la naturaleza hasta la tecnología, y se relaciona con la impermanencia de las cosas. En un mundo en constante cambio, la transitoriedad nos recuerda que nada es permanente y que cada momento es único. Esta noción puede evocar sentimientos de nostalgia, reflexión y apreciación por lo que tenemos en el presente, ya que lo que hoy es tangible puede desvanecerse rápidamente. La transitoriedad también se puede observar en fenómenos naturales, como las estaciones del año, que cambian y evolucionan, así como en la vida humana, donde las etapas de la vida son temporales y están marcadas por transiciones significativas. En el ámbito tecnológico, la transitoriedad se refleja en la rápida obsolescencia de dispositivos y software, donde lo que es innovador hoy puede ser considerado obsoleto en un corto período de tiempo. Este concepto invita a una valoración más profunda de nuestras experiencias y posesiones, fomentando una mentalidad que busca disfrutar del presente y reconocer la belleza de lo efímero.