Descripción: El cumplimiento normativo es el proceso de asegurar que una organización siga las leyes, regulaciones y directrices relevantes. Este proceso es fundamental para la gestión de riesgos y la protección de activos, ya que permite a las organizaciones operar dentro de un marco legal y ético. El cumplimiento normativo abarca diversas áreas, incluyendo la seguridad en tecnologías de la información, la ciberinteligencia, la privacidad y protección de datos, y la ciberseguridad, entre otras. Las organizaciones deben establecer políticas y procedimientos que garanticen que sus operaciones se alineen con las normativas aplicables, lo que incluye la implementación de controles de seguridad, auditorías regulares y formación del personal. Además, el cumplimiento normativo no solo se refiere a la adherencia a leyes locales, sino que también puede incluir regulaciones internacionales, lo que complica aún más el panorama para las empresas que operan en múltiples jurisdicciones. En un entorno tecnológico en constante evolución, el cumplimiento normativo se ha vuelto aún más crítico, ya que las amenazas cibernéticas y las violaciones de datos son cada vez más comunes. Por lo tanto, las organizaciones deben estar preparadas para adaptarse a cambios en las regulaciones y a nuevas amenazas, asegurando así la confianza de sus clientes y la integridad de sus operaciones.
