Descripción: La configuración de servicios en un sistema se refiere al proceso de establecer y ajustar las diversas funcionalidades y características de los servicios que se ejecutan en un entorno informático. Esto incluye la instalación, personalización y optimización de aplicaciones y recursos que operan en la infraestructura de TI. La configuración de servicios es esencial para garantizar que los sistemas funcionen de manera eficiente y cumplan con los requisitos específicos de los usuarios y las organizaciones. En el contexto de la computación en la nube, por ejemplo, implica la selección de instancias, la asignación de recursos y la implementación de políticas de seguridad. En entornos de virtualización, se trata de gestionar máquinas virtuales y sus configuraciones de red y almacenamiento. Asimismo, en el ámbito de la virtualización de funciones de red, la configuración de servicios permite definir cómo se implementan y gestionan las funciones de red en un entorno virtualizado. La configuración como código es otra tendencia que permite a los desarrolladores y administradores de sistemas definir la configuración de servicios a través de scripts y archivos de configuración, facilitando la automatización y la reproducibilidad. En resumen, la configuración de servicios es un componente crítico en la administración de sistemas modernos, asegurando que los servicios se adapten a las necesidades cambiantes de las organizaciones y sus usuarios.