Descripción: Un balanceador de carga de aplicaciones es una herramienta esencial en la arquitectura de redes modernas, diseñada para distribuir automáticamente el tráfico de aplicaciones entrantes entre múltiples objetivos, como servidores o contenedores. Su función principal es optimizar la utilización de recursos, mejorar la disponibilidad y garantizar la escalabilidad de las aplicaciones. Al recibir solicitudes de usuarios, el balanceador de carga evalúa la carga actual de cada objetivo y redirige el tráfico de manera eficiente, evitando que un solo servidor se sobrecargue. Esto no solo mejora el rendimiento, sino que también proporciona redundancia, ya que si un objetivo falla, el balanceador puede redirigir el tráfico a otros disponibles. En entornos de computación en la nube y arquitecturas distribuidas, los balanceadores de carga son fundamentales para gestionar aplicaciones y microservicios, permitiendo a las organizaciones escalar sus operaciones de manera efectiva y mantener una experiencia de usuario fluida. Además, ofrecen características avanzadas como la terminación SSL, la autenticación y la monitorización del tráfico, lo que los convierte en una pieza clave en la infraestructura de TI moderna.
