Descripción: La carga promedio es una métrica crucial en el monitoreo del sistema que refleja la cantidad promedio de procesos que están en espera para ser ejecutados en un período de tiempo determinado. Esta medida se expresa generalmente en intervalos de 1, 5 y 15 minutos, proporcionando una visión clara de la carga del sistema a corto y medio plazo. Un valor de carga promedio más alto indica que hay más procesos esperando en la cola de ejecución, lo que puede ser un signo de que el sistema está sobrecargado o que los recursos disponibles son insuficientes para manejar la demanda. Por otro lado, una carga promedio baja sugiere que el sistema está funcionando de manera eficiente y que los procesos se están ejecutando sin demoras significativas. Es importante destacar que la carga promedio no solo considera los procesos en ejecución, sino también aquellos que están en estado de espera, lo que la convierte en una herramienta valiosa para la administración de sistemas y la optimización del rendimiento. En entornos de tecnología de información modernos, el monitoreo de la carga promedio es esencial para garantizar que las aplicaciones funcionen sin problemas y para identificar cuellos de botella en el rendimiento del sistema.