Descripción: La fase de inicio en las metodologías ágiles es un momento crucial en el ciclo de vida de un proyecto, donde se establecen las bases para el desarrollo exitoso del mismo. Durante esta fase, se define la visión del proyecto, que proporciona una dirección clara y un propósito que guiará a todo el equipo. Además, se determina el alcance del proyecto, lo que implica identificar las características y funcionalidades que se incluirán, así como las que se dejarán fuera. Este proceso de definición es esencial para evitar malentendidos y asegurar que todos los miembros del equipo estén alineados con los objetivos. La viabilidad del proyecto también se evalúa en esta etapa, considerando factores como el tiempo, los recursos disponibles y las capacidades técnicas. La fase de inicio no solo establece un marco de trabajo, sino que también fomenta la colaboración entre los interesados, permitiendo que sus expectativas y necesidades sean consideradas desde el principio. En resumen, esta fase es fundamental para sentar las bases de un proyecto ágil, asegurando que todos los aspectos críticos sean abordados antes de avanzar a las etapas de desarrollo y ejecución.