Descripción: El Acceso al Servicio Universal asegura que todas las personas tengan la capacidad de acceder a servicios de telecomunicaciones esenciales. Este concepto es fundamental en la era digital, donde la conectividad se ha convertido en un derecho básico. El acceso universal implica que, independientemente de la ubicación geográfica, situación económica o condiciones sociales, todos los individuos deben tener la oportunidad de utilizar servicios de telecomunicaciones como telefonía, internet y otros servicios digitales. Este acceso no solo se refiere a la disponibilidad de infraestructura, sino también a la asequibilidad y la calidad de los servicios ofrecidos. En un mundo cada vez más interconectado, garantizar el acceso universal es crucial para fomentar la inclusión social, el desarrollo económico y la igualdad de oportunidades. La virtualización de funciones de red (NFV) juega un papel importante en este contexto, ya que permite a los proveedores de servicios implementar soluciones más flexibles y escalables, facilitando así la expansión de la infraestructura necesaria para ofrecer servicios de telecomunicaciones a poblaciones desatendidas. En resumen, el Acceso al Servicio Universal es un pilar esencial para construir sociedades más equitativas y conectadas, donde todos puedan beneficiarse de las ventajas que ofrece la tecnología moderna.