Descripción: La Acción de Inicio Automático en la virtualización define el comportamiento de las máquinas virtuales (VM) cuando el host se reinicia. Esta característica permite a los administradores de sistemas configurar qué VMs deben iniciarse automáticamente, lo que resulta crucial para la continuidad del negocio y la gestión eficiente de recursos. Al establecer una acción de inicio automático, se puede seleccionar entre varias opciones, como iniciar la VM inmediatamente, retrasar su inicio o no iniciarla en absoluto. Esta funcionalidad es especialmente útil en entornos donde se requiere alta disponibilidad, ya que asegura que las aplicaciones críticas se reinicien sin intervención manual tras un fallo del sistema o un mantenimiento programado. Además, la configuración de la acción de inicio automático puede ser personalizada para cada VM, permitiendo a los administradores priorizar el inicio de ciertas máquinas sobre otras. Esto no solo optimiza el tiempo de arranque del sistema, sino que también ayuda a evitar conflictos de recursos que podrían surgir si múltiples VMs intentan arrancar simultáneamente. En resumen, la Acción de Inicio Automático es una herramienta esencial en la administración de entornos virtualizados, facilitando la recuperación y la gestión de máquinas virtuales.
