Descripción: La ‘Alta Calidad’ en el contexto del desarrollo de software se refiere a una medida de excelencia en la creación y funcionalidad del software. Este concepto abarca no solo la ausencia de errores, sino también la capacidad del software para satisfacer las necesidades del usuario de manera efectiva y eficiente. La alta calidad se logra a través de prácticas como la programación en pareja, la integración continua y la realización de pruebas automatizadas. Estas prácticas fomentan un entorno de desarrollo colaborativo y ágil, donde los desarrolladores pueden identificar y corregir problemas rápidamente, asegurando que el producto final no solo funcione correctamente, sino que también sea fácil de mantener y escalar. La alta calidad implica un compromiso constante con la mejora y la adaptación, lo que permite a los equipos responder a los cambios en los requisitos del cliente y a las condiciones del mercado. En resumen, la alta calidad en el desarrollo de software es un enfoque integral que busca no solo cumplir con los estándares técnicos, sino también proporcionar un valor real a los usuarios finales.