Descripción: El análisis de fricción es el proceso de identificar y reducir la resistencia en un flujo de trabajo. Este enfoque se centra en descomponer los procesos existentes para detectar cuellos de botella, redundancias y cualquier elemento que impida un flujo eficiente. La fricción en los procesos puede manifestarse de diversas maneras, como en la comunicación ineficaz entre departamentos, la falta de recursos adecuados o la complejidad innecesaria en las tareas. Al abordar estos puntos de fricción, las organizaciones pueden optimizar sus operaciones, mejorar la productividad y aumentar la satisfacción del cliente. Este análisis no solo se aplica a la manufactura o la producción, sino que también es relevante en entornos de servicios, donde la experiencia del usuario puede verse afectada por procesos ineficientes. La implementación de un análisis de fricción puede llevar a la creación de flujos de trabajo más ágiles y adaptables, permitiendo a las empresas responder mejor a las demandas del mercado y a las necesidades de sus clientes. En resumen, el análisis de fricción es una herramienta esencial en la gestión de procesos que busca eliminar obstáculos y facilitar un flujo de trabajo más fluido y eficiente.
