Descripción: El análisis de procesos es el acto de examinar un proceso para identificar áreas de mejora. Este enfoque se centra en descomponer un proceso en sus componentes fundamentales para entender su funcionamiento y detectar ineficiencias. A través de diversas técnicas y herramientas, se busca optimizar cada etapa del proceso, garantizando que se alineen con los objetivos organizacionales. El análisis de procesos no solo se limita a la identificación de problemas, sino que también implica la evaluación de las interacciones entre diferentes etapas y actores involucrados. Este análisis puede ser cualitativo o cuantitativo, utilizando métricas y datos para respaldar las conclusiones. La relevancia del análisis de procesos radica en su capacidad para impulsar la eficiencia operativa, reducir costos y mejorar la calidad del producto o servicio final. En un entorno empresarial cada vez más competitivo, las organizaciones que implementan un análisis de procesos efectivo pueden adaptarse más rápidamente a los cambios del mercado y satisfacer mejor las necesidades de sus clientes. Además, este enfoque se integra frecuentemente con metodologías como la mejora continua y la gestión de procesos, donde se busca no solo la optimización, sino también la innovación en la forma en que se llevan a cabo las actividades diarias.