Descripción: La analítica basada en web se refiere a servicios de análisis de datos que se acceden y operan a través de interfaces web. Esta modalidad permite a los usuarios recopilar, medir y analizar datos de diversas fuentes en línea, como sitios web, aplicaciones móviles y redes sociales, facilitando la toma de decisiones informadas. Las herramientas de analítica web suelen ofrecer visualizaciones interactivas, informes personalizables y métricas en tiempo real, lo que permite a las organizaciones entender mejor el comportamiento de sus usuarios y optimizar sus estrategias de marketing y desarrollo de productos. La analítica basada en web se integra frecuentemente con otras tecnologías, como el almacenamiento en la nube y la inteligencia artificial, para proporcionar análisis más profundos y predictivos. Su accesibilidad a través de navegadores web elimina la necesidad de instalaciones locales complejas, permitiendo a los equipos de trabajo colaborar y acceder a la información desde cualquier lugar y dispositivo. Esta flexibilidad y escalabilidad son características clave que han contribuido a su popularidad en el ámbito empresarial y académico.
Historia: La analítica basada en web comenzó a tomar forma a mediados de la década de 1990 con el auge de Internet. Uno de los hitos más significativos fue el lanzamiento de herramientas como WebTrends en 1993, que permitieron a los propietarios de sitios web rastrear el tráfico y el comportamiento de los usuarios. A medida que la tecnología avanzaba, Google lanzó Google Analytics en 2005, revolucionando el campo al ofrecer una plataforma gratuita y accesible para el análisis de datos web. Desde entonces, la analítica web ha evolucionado, incorporando capacidades avanzadas como el análisis predictivo y la integración con redes sociales.
Usos: La analítica basada en web se utiliza principalmente para medir el rendimiento de sitios web y aplicaciones, analizar el comportamiento del usuario, optimizar campañas de marketing digital y mejorar la experiencia del cliente. También se aplica en la investigación de mercado, permitiendo a las empresas entender mejor las preferencias y necesidades de sus consumidores. Además, se utiliza en la evaluación de la efectividad de estrategias de contenido y en la identificación de tendencias emergentes en el comportamiento del usuario.
Ejemplos: Un ejemplo de analítica basada en web es Google Analytics, que permite a los propietarios de sitios web rastrear métricas como el número de visitantes, la duración de las visitas y las tasas de conversión. Otra herramienta popular es Adobe Analytics, que ofrece análisis más avanzados y segmentación de audiencia. Además, plataformas como Hotjar permiten a los usuarios ver mapas de calor y grabaciones de sesiones para entender cómo interactúan los visitantes con su sitio.