Descripción: La ‘apertura al cambio’ es un principio fundamental en las metodologías ágiles que se refiere a la disposición de un equipo de trabajo para aceptar y adaptarse a cambios en los requisitos y procesos de un proyecto. Este enfoque reconoce que, en entornos dinámicos y complejos, los requisitos pueden evolucionar a medida que se avanza en el desarrollo, lo que puede ser impulsado por nuevas necesidades del cliente, cambios en el mercado o descubrimientos durante el proceso de trabajo. La apertura al cambio fomenta una mentalidad flexible y colaborativa, donde los equipos están preparados para ajustar su rumbo y priorizar la entrega de valor sobre la adherencia estricta a un plan predefinido. Esta característica no solo mejora la satisfacción del cliente, al permitir que sus necesidades sean atendidas de manera más efectiva, sino que también promueve un ambiente de trabajo más innovador y proactivo, donde se valora la retroalimentación continua y la mejora constante. En resumen, la apertura al cambio es esencial para maximizar la efectividad de las metodologías ágiles, permitiendo a los equipos responder rápidamente a las circunstancias cambiantes y a las expectativas de los interesados (stakeholders).
