Descripción: Una API Distribuida es un conjunto de protocolos y herramientas que permite la comunicación y el intercambio de datos entre diferentes aplicaciones que operan en múltiples servidores o ubicaciones. A diferencia de las APIs tradicionales, que suelen estar centralizadas en un único servidor, las APIs distribuidas están diseñadas para funcionar en un entorno descentralizado, lo que les permite ofrecer mayor escalabilidad, resiliencia y eficiencia. Estas APIs pueden gestionar solicitudes de manera simultánea y distribuir la carga de trabajo entre varios nodos, lo que mejora el rendimiento general del sistema. Además, las APIs distribuidas son fundamentales en arquitecturas modernas como microservicios y sistemas basados en la nube, donde la flexibilidad y la capacidad de respuesta son esenciales. Su diseño permite que diferentes componentes de software se comuniquen de manera efectiva, independientemente de su ubicación física, lo que facilita la integración de servicios y aplicaciones en un ecosistema digital cada vez más complejo. En resumen, las APIs distribuidas son una pieza clave en la infraestructura tecnológica actual, permitiendo la creación de aplicaciones más robustas y adaptables a las necesidades cambiantes del mercado.