Descripción: La arquitectura abierta es un enfoque de diseño que permite la integración de múltiples componentes y sistemas, facilitando la interoperabilidad y la flexibilidad en el desarrollo de tecnologías. Este concepto se aplica en diversas áreas, incluyendo sistemas operativos, hardware, software y robótica. La arquitectura abierta permite a los desarrolladores crear aplicaciones y soluciones que funcionen en una variedad de dispositivos, desde smartphones hasta electrodomésticos inteligentes y sistemas industriales, promoviendo un ecosistema más cohesivo. Este enfoque se traduce en la capacidad de personalizar y adaptar los sistemas para diferentes aplicaciones, lo que resulta en un rendimiento optimizado y un consumo energético eficiente. En robótica, la arquitectura abierta permite la integración de diferentes módulos y sensores, lo que facilita la creación de robots más versátiles y adaptables a diversas tareas. Las características principales de la arquitectura abierta incluyen la modularidad, la estandarización de interfaces y la capacidad de actualización, lo que permite a los sistemas evolucionar con el tiempo y adaptarse a nuevas necesidades. Este enfoque no solo fomenta la innovación, sino que también reduce los costos de desarrollo al permitir la reutilización de componentes existentes y la colaboración entre diferentes actores del mercado.