Descripción: La Asignación de Activos se refiere a la distribución de recursos entre máquinas virtuales en entornos de virtualización. Este proceso es fundamental para garantizar que cada máquina virtual (VM) reciba la cantidad adecuada de recursos, como CPU, memoria y almacenamiento, para funcionar de manera eficiente. Las tecnologías de virtualización permiten a los administradores gestionar múltiples VMs en un solo servidor físico, optimizando así el uso de hardware. La asignación de activos no solo implica la cantidad de recursos asignados, sino también la configuración de prioridades y la gestión de cargas de trabajo. Esto es crucial en entornos donde se ejecutan aplicaciones críticas, ya que una mala asignación puede llevar a cuellos de botella en el rendimiento. Además, existen herramientas para monitorizar el uso de recursos, lo que permite a los administradores ajustar la asignación según las necesidades cambiantes de las aplicaciones y los usuarios. La flexibilidad en la asignación de activos también facilita la implementación de estrategias de recuperación ante desastres y la escalabilidad, permitiendo a las organizaciones adaptarse rápidamente a nuevas demandas sin necesidad de inversiones significativas en hardware adicional.
