Descripción: El cifrado variable es un método de cifrado que se adapta y cambia según ciertos parámetros, lo que permite una mayor flexibilidad y seguridad en la protección de datos. A diferencia de los métodos de cifrado estáticos, donde la misma clave se utiliza de manera constante, el cifrado variable puede emplear diferentes claves o algoritmos en función de factores como el tiempo, la ubicación o el tipo de datos. Esta variabilidad no solo dificulta la tarea de los atacantes al intentar descifrar la información, sino que también permite a los sistemas de seguridad adaptarse a nuevas amenazas y vulnerabilidades. El cifrado variable puede ser implementado en diversas formas, incluyendo el uso de claves que cambian periódicamente o la aplicación de algoritmos que se ajustan según el contexto. Su relevancia ha crecido en un mundo donde la protección de datos es crucial, especialmente en sectores como la banca, la salud y las telecomunicaciones, donde la confidencialidad y la integridad de la información son primordiales. En resumen, el cifrado variable representa una evolución en las técnicas de seguridad, ofreciendo una capa adicional de protección frente a los riesgos asociados con el almacenamiento y la transmisión de datos sensibles.