Descripción: La cobertura de pruebas es una métrica que indica el porcentaje del código fuente que ha sido ejecutado durante las pruebas automatizadas. Esta medida es crucial en el contexto de un pipeline de integración continua, ya que permite a los desarrolladores evaluar la efectividad de sus pruebas y la calidad del software. Una alta cobertura de pruebas sugiere que una gran parte del código ha sido validada, lo que puede reducir la probabilidad de errores en producción. Sin embargo, es importante destacar que una alta cobertura no garantiza la ausencia de errores, ya que puede haber casos no contemplados en las pruebas. La cobertura de pruebas se puede medir de diversas maneras, incluyendo la cobertura de líneas, la cobertura de ramas y la cobertura de funciones, cada una proporcionando diferentes perspectivas sobre qué tan exhaustivas son las pruebas. En un entorno de integración continua, donde el código se integra y se prueba de manera frecuente, mantener una buena cobertura de pruebas es esencial para asegurar que los cambios no introduzcan nuevos errores y que el software se mantenga en un estado funcional. Además, la cobertura de pruebas puede ser utilizada como un indicador para la refactorización del código, ayudando a los desarrolladores a identificar áreas que necesitan atención o que podrían beneficiarse de una mayor atención en las pruebas.
