Descripción: La Infraestructura de Clave Pública (PKI, por sus siglas en inglés) es un conjunto de roles, políticas, hardware, software y procedimientos necesarios para crear, gestionar, distribuir, usar, almacenar y revocar certificados digitales. Estos certificados son esenciales para establecer la identidad de los usuarios y dispositivos en un entorno digital, permitiendo la comunicación segura y la autenticación. Los componentes clave de una PKI incluyen la Autoridad de Certificación (CA), que emite y gestiona los certificados; la Autoridad de Registro (RA), que verifica la identidad de los solicitantes de certificados; y los repositorios de certificados, donde se almacenan y se pueden consultar los certificados emitidos. Además, la PKI también abarca políticas de seguridad que definen cómo se deben manejar los certificados y las claves criptográficas, así como los procedimientos para la revocación de certificados que ya no son válidos. La PKI es fundamental en la implementación de protocolos de seguridad como SSL/TLS, que protegen las comunicaciones en línea, y en la firma digital de documentos, asegurando la integridad y autenticidad de la información. En resumen, la PKI proporciona la infraestructura necesaria para la confianza en las transacciones digitales, garantizando que las partes involucradas puedan verificar la identidad y la integridad de los datos intercambiados.