Descripción: El ‘Conflicto de Controlador’ se refiere a una situación en la que dos controladores de dispositivos son incompatibles entre sí, lo que puede resultar en un mal funcionamiento del hardware o del software en un sistema informático. Este conflicto puede surgir cuando dos controladores intentan acceder al mismo recurso del sistema, como una impresora o una tarjeta gráfica, generando errores que pueden afectar el rendimiento general del equipo. Los conflictos de controladores son comunes en entornos donde se instalan múltiples dispositivos o actualizaciones de software, ya que cada controlador tiene su propio conjunto de instrucciones y requisitos de hardware. La identificación y resolución de estos conflictos es crucial para mantener la estabilidad y eficiencia del sistema operativo. Los síntomas de un conflicto de controlador pueden incluir pantallas azules, fallos en la instalación de dispositivos, o el mal funcionamiento de aplicaciones que dependen de hardware específico. Por lo tanto, la gestión adecuada de los controladores es esencial para garantizar que todos los componentes de un sistema trabajen en armonía, evitando así problemas que puedan interrumpir la experiencia del usuario o la funcionalidad del sistema.