Descripción: La contención de brechas se refiere a las acciones estratégicas y tácticas implementadas para limitar el impacto de una brecha de seguridad en un sistema o red. Este proceso es crucial en la gestión de incidentes de seguridad, ya que busca minimizar el daño potencial y proteger la integridad de los datos y sistemas afectados. La contención puede incluir medidas como la desconexión de sistemas comprometidos, la implementación de parches de seguridad y la reconfiguración de firewalls y otras herramientas de seguridad. La orquestación de seguridad juega un papel fundamental en este contexto, ya que permite coordinar y automatizar las respuestas a incidentes, asegurando que las acciones se realicen de manera eficiente y efectiva. La automatización, por su parte, ayuda a acelerar la respuesta a incidentes, reduciendo el tiempo de reacción y limitando la exposición a amenazas. En conjunto, estas prácticas no solo ayudan a mitigar el impacto inmediato de una brecha, sino que también contribuyen a la mejora continua de las políticas de seguridad y a la preparación para futuros incidentes.
