Descripción: El control de acceso a aplicaciones se refiere a las políticas y tecnologías que restringen el acceso a aplicaciones específicas, garantizando que solo los usuarios autorizados puedan interactuar con ellas. Este mecanismo es fundamental en la seguridad en la nube, donde las aplicaciones suelen estar alojadas en entornos compartidos y accesibles a través de Internet. Las características principales del control de acceso incluyen la autenticación, que verifica la identidad del usuario, y la autorización, que determina qué recursos puede utilizar un usuario una vez autenticado. Además, se pueden implementar políticas de acceso basadas en roles (RBAC), donde los permisos se asignan según el rol del usuario dentro de la organización. La relevancia del control de acceso radica en su capacidad para proteger datos sensibles y cumplir con normativas de seguridad, evitando accesos no autorizados que podrían resultar en filtraciones de información o ataques cibernéticos. En un mundo donde las amenazas a la seguridad son cada vez más sofisticadas, el control de acceso a aplicaciones se convierte en una línea de defensa crítica para las organizaciones que operan tanto en la nube como en entornos locales.