Descripción: El control de transmisión es un conjunto de técnicas y protocolos diseñados para gestionar la transmisión de datos a través de redes de comunicación, asegurando que la entrega de información sea confiable y eficiente. Este proceso implica la regulación del flujo de datos entre dispositivos, evitando la congestión y garantizando que los paquetes de datos lleguen a su destino sin pérdidas ni errores. En el contexto de redes, el control de transmisión se convierte en un elemento crucial para mantener la calidad de servicio (QoS), ya que permite priorizar ciertos tipos de tráfico y gestionar la latencia. A través de mecanismos como la confirmación de recepción y la retransmisión de paquetes perdidos, se busca minimizar el impacto de las interrupciones en la comunicación. Además, el control de transmisión se integra con múltiples protocolos de comunicación, que optimizan la ruta de los datos a través de la red, asegurando que la información fluya de manera eficiente y sin interrupciones. En resumen, el control de transmisión es fundamental para el funcionamiento de redes modernas, garantizando que la comunicación entre dispositivos sea tanto efectiva como confiable.
