Descripción: El crecimiento empresarial se refiere al aumento en tamaño, ingresos o cuota de mercado de una empresa. Este fenómeno es crucial para la sostenibilidad y la competitividad en el mercado actual. El crecimiento puede manifestarse de diversas maneras, incluyendo la expansión de la base de clientes, el aumento de las ventas, la diversificación de productos o servicios, y la mejora en la eficiencia operativa. Un crecimiento saludable no solo implica un incremento en los números, sino también una mejora en la calidad de los productos y servicios ofrecidos, así como en la satisfacción del cliente. Las empresas que logran un crecimiento sostenido suelen tener una visión clara, una estrategia bien definida y la capacidad de adaptarse a los cambios del mercado. Además, el crecimiento empresarial puede ser impulsado por factores internos, como la innovación y la inversión en tecnología, así como por factores externos, como las tendencias del mercado y la demanda del consumidor. En un entorno empresarial cada vez más competitivo, el crecimiento se convierte en un indicador clave de éxito y viabilidad a largo plazo.