Descripción: El cumplimiento de red se refiere a la capacidad de asegurar que las operaciones de red se adhieran a regulaciones y estándares establecidos, lo que impacta directamente en el escalado de las infraestructuras tecnológicas. Este concepto es fundamental en un entorno donde las organizaciones deben cumplir con normativas de seguridad, privacidad y operativas, especialmente en un mundo cada vez más digitalizado. El cumplimiento de red implica la implementación de políticas y procedimientos que garanticen la integridad, disponibilidad y confidencialidad de los datos que circulan a través de la red. Esto incluye la monitorización constante de las actividades de red, la gestión de accesos y la aplicación de controles de seguridad que prevengan accesos no autorizados. Además, el cumplimiento de red se ve influenciado por tendencias emergentes como el modelo de seguridad Zero Trust, que promueve la verificación continua de usuarios y dispositivos, así como la integración de soluciones de recuperación ante desastres como servicio (DRaaS) que aseguran la continuidad del negocio ante eventos adversos. En el contexto de la nube, el cumplimiento de red también se relaciona con el autoescalado, permitiendo que las infraestructuras se adapten dinámicamente a las demandas cambiantes, todo mientras se mantiene la conformidad con las normativas aplicables. Por último, en el ámbito del Internet de las Cosas (IoT), el cumplimiento de red es crucial para proteger dispositivos interconectados y garantizar que operen dentro de los estándares de seguridad requeridos.