Descripción: El ‘Depósito en Garantía’ es un acuerdo financiero en el que una tercera parte, conocida como agente de custodia, mantiene y regula el pago de los fondos requeridos para dos partes involucradas en una transacción específica. Este mecanismo se utiliza para asegurar que ambas partes cumplan con sus obligaciones contractuales antes de que se complete la transacción. En esencia, el depósito en garantía actúa como un intermediario que protege los intereses de ambas partes, minimizando el riesgo de incumplimiento. Este tipo de acuerdo es común en diversas transacciones comerciales, incluyendo la compra de bienes raíces, donde el comprador deposita una suma de dinero que se libera al vendedor solo cuando se cumplen ciertas condiciones. Las características principales de un depósito en garantía incluyen la neutralidad del agente de custodia, la claridad en los términos del acuerdo y la protección de los fondos hasta que se cumplan las condiciones acordadas. Su relevancia radica en la confianza que genera entre las partes, facilitando transacciones que de otro modo podrían ser consideradas demasiado arriesgadas. En el contexto digital, el depósito en garantía puede ser utilizado para asegurar la transferencia de datos o activos digitales, garantizando que ambas partes cumplan con los términos de un acuerdo antes de que se realice la entrega final.
