Descripción: El desbalance electrolítico se refiere a un desequilibrio en los niveles de electrolitos en el cuerpo, que son minerales esenciales que llevan una carga eléctrica y son cruciales para diversas funciones fisiológicas. Los electrolitos más comunes incluyen sodio, potasio, calcio, magnesio, cloruro, bicarbonato y fosfato. Estos minerales son fundamentales para la regulación del equilibrio hídrico, la función muscular, la transmisión de impulsos nerviosos y el mantenimiento del pH corporal. Un desbalance puede ocurrir por diversas razones, como deshidratación, enfermedades renales, trastornos endocrinos, o como efecto secundario de ciertos medicamentos. Los síntomas de un desbalance electrolítico pueden variar desde leves, como calambres musculares y fatiga, hasta graves, como arritmias cardíacas y convulsiones. La detección y corrección de este desbalance son esenciales para la salud general, ya que un desequilibrio prolongado puede llevar a complicaciones serias. Por lo tanto, el monitoreo de los niveles de electrolitos es una práctica común en entornos clínicos, especialmente en pacientes con condiciones que afectan la homeostasis del cuerpo.