Descripción: Una dirección IP estática es una dirección IP que no cambia y se asigna a un dispositivo de forma permanente. A diferencia de las direcciones IP dinámicas, que pueden variar cada vez que un dispositivo se conecta a una red, las direcciones IP estáticas son fijas y se utilizan para identificar de manera constante un dispositivo en una red. Esto es especialmente útil en situaciones donde se requiere una conexión estable y confiable, como en servidores web, impresoras de red y dispositivos de red que necesitan ser accesibles de forma continua. Las direcciones IP estáticas son esenciales para la configuración de redes, ya que permiten un enrutamiento más predecible y simplifican la gestión de dispositivos en entornos complejos. Además, son fundamentales en la protección contra ataques DDoS, ya que permiten implementar medidas de seguridad más efectivas al tener un punto de referencia constante. En el contexto de redes y virtualización, las direcciones IP estáticas facilitan la asignación de recursos y la gestión de servicios, garantizando que los dispositivos y aplicaciones puedan comunicarse de manera eficiente y segura.