Descripción: Un ecosistema acuático es un sistema biológico que se desarrolla en un cuerpo de agua, ya sea dulce, salado o salobre. Este tipo de ecosistema incluye una variedad de organismos vivos, como plantas, animales, bacterias y hongos, que interactúan entre sí y con su entorno físico. Los ecosistemas acuáticos se caracterizan por su diversidad biológica y su capacidad para sostener vida en condiciones que varían desde aguas tranquilas de lagos y ríos hasta las dinámicas y complejas interacciones de los océanos. La luz solar, la temperatura, la salinidad y la disponibilidad de nutrientes son factores clave que influyen en la estructura y función de estos ecosistemas. Además, los ecosistemas acuáticos son esenciales para el ciclo del agua, la regulación del clima y la provisión de recursos naturales. Su salud y equilibrio son fundamentales para la biodiversidad global y el bienestar humano, ya que proporcionan hábitats, alimentos y servicios ecosistémicos vitales. La conservación de estos ecosistemas es crucial, dado que enfrentan amenazas como la contaminación, el cambio climático y la sobreexplotación de recursos, lo que pone en riesgo tanto a las especies que habitan en ellos como a las comunidades humanas que dependen de ellos.
