Descripción: El enfoque estrecho se refiere a concentrarse en un área o aspecto específico de un negocio o mercado. Este tipo de estrategia permite a las empresas especializarse y profundizar en un nicho particular, lo que puede resultar en una ventaja competitiva significativa. Al limitar el alcance de sus operaciones, las organizaciones pueden optimizar sus recursos, mejorar la calidad de sus productos o servicios y desarrollar una comprensión más profunda de las necesidades y preferencias de sus clientes. Este enfoque es especialmente relevante en mercados saturados, donde la diferenciación es clave para destacar entre la competencia. Las empresas que adoptan un enfoque estrecho suelen ser más ágiles y capaces de adaptarse rápidamente a los cambios en su entorno, lo que les permite responder de manera efectiva a las demandas del mercado. Además, este tipo de estrategia puede fomentar la lealtad del cliente, ya que los consumidores a menudo valoran la especialización y la experiencia en un área específica. En resumen, el enfoque estrecho es una estrategia que prioriza la especialización y la profundidad sobre la amplitud, permitiendo a las empresas maximizar su impacto en un segmento particular del mercado.