Descripción: El enrutamiento híbrido es un enfoque que combina características de enrutamiento de estado de enlace y enrutamiento de distancia vectorial para optimizar el rendimiento de las redes. Este método busca aprovechar las ventajas de ambos tipos de enrutamiento, permitiendo una mayor eficiencia en la gestión de rutas y una mejor convergencia. En el enrutamiento híbrido, los routers pueden intercambiar información sobre la topología de la red y las métricas de enrutamiento, lo que les permite tomar decisiones más informadas sobre cómo dirigir el tráfico. Una de las implementaciones más conocidas de este tipo de enrutamiento es el Protocolo de Enrutamiento Mejorado por Vector (EIGRP), desarrollado por Cisco. EIGRP utiliza un algoritmo de enrutamiento avanzado que combina la rapidez de los protocolos de distancia vectorial con la robustez de los protocolos de estado de enlace. Esto permite que EIGRP mantenga una tabla de enrutamiento más precisa y actualizada, minimizando el tiempo de inactividad y mejorando la eficiencia general de la red. El enrutamiento híbrido es especialmente útil en redes grandes y complejas, donde la capacidad de adaptarse rápidamente a los cambios en la topología es crucial para mantener un rendimiento óptimo.
Historia: EIGRP fue introducido por Cisco en 1994 como una mejora sobre el protocolo IGRP (Interior Gateway Routing Protocol). A lo largo de los años, EIGRP ha evolucionado para incluir características avanzadas como la capacidad de realizar enrutamiento multiprotocolo y la implementación de la métrica de ancho de banda, retardo, carga y confiabilidad. En 2013, Cisco anunció que EIGRP se convertiría en un estándar abierto, lo que permitió su uso en dispositivos de otros fabricantes.
Usos: El enrutamiento híbrido se utiliza principalmente en redes empresariales y de proveedores de servicios donde se requiere una gestión eficiente del tráfico y una rápida convergencia. EIGRP, como protocolo híbrido, es comúnmente implementado en entornos de red grandes y complejos, donde la capacidad de adaptarse a cambios en la topología es esencial para mantener la conectividad y el rendimiento.
Ejemplos: Un ejemplo práctico del uso de enrutamiento híbrido es en una red corporativa que conecta múltiples sucursales. Al implementar EIGRP, la empresa puede asegurar que el tráfico entre las sucursales se dirija de manera eficiente, adaptándose rápidamente a cualquier fallo en la red y optimizando el uso del ancho de banda disponible.