Descripción: El escalado no gestionado es un enfoque de autoescalado en la nube que permite a los sistemas ajustar automáticamente sus recursos sin intervención manual. Este tipo de escalado se basa en reglas predefinidas que determinan cuándo y cómo se deben añadir o eliminar recursos, como servidores o instancias de computación, en respuesta a la demanda del tráfico o la carga de trabajo. Las características principales del escalado no gestionado incluyen su capacidad para reaccionar rápidamente a cambios en la demanda, lo que ayuda a optimizar el rendimiento y la eficiencia de los recursos. Además, al eliminar la necesidad de intervención humana, se reduce el riesgo de errores y se mejora la agilidad operativa. Este enfoque es especialmente relevante en entornos de nube, donde la elasticidad y la escalabilidad son fundamentales para manejar fluctuaciones en la carga de trabajo. En resumen, el escalado no gestionado permite a las organizaciones adaptarse de manera eficiente a las variaciones en la demanda, asegurando que los recursos estén disponibles cuando se necesitan y evitando costos innecesarios por recursos infrautilizados.
