Descripción: La espectroscopía de absorción de rayos X es una técnica analítica que permite estudiar la estructura electrónica de materiales mediante la interacción de rayos X con la materia. Esta técnica se basa en la absorción de radiación de rayos X por los átomos de un material, lo que provoca que los electrones sean excitados a niveles de energía más altos. Al medir la cantidad de radiación absorbida a diferentes longitudes de onda, se puede obtener información sobre la composición química y el estado de oxidación de los elementos presentes en la muestra. La espectroscopía de absorción de rayos X es especialmente útil para el análisis de materiales en estado sólido, líquidos y gases, y se utiliza en diversas disciplinas, incluyendo la química, la física y la ciencia de materiales. Su capacidad para proporcionar información detallada sobre la estructura electrónica y la disposición atómica de los elementos la convierte en una herramienta valiosa en la investigación científica y en aplicaciones industriales.
Historia: La espectroscopía de absorción de rayos X comenzó a desarrollarse en la década de 1930, cuando se empezaron a utilizar rayos X para estudiar la estructura atómica de los materiales. En la década de 1950, se realizaron avances significativos en la técnica, gracias a la introducción de detectores más sensibles y la mejora de las fuentes de rayos X. A lo largo de las décadas, la espectroscopía de absorción de rayos X ha evolucionado, incorporando técnicas como la espectroscopía de absorción de rayos X de alta energía y la espectroscopía de absorción de rayos X de resonancia, lo que ha ampliado su aplicabilidad en diversas áreas de investigación.
Usos: La espectroscopía de absorción de rayos X se utiliza en una variedad de aplicaciones, incluyendo la caracterización de materiales, el análisis de catalizadores, la investigación de materiales semiconductores y la biología estructural. También es fundamental en el estudio de materiales en condiciones extremas, como altas presiones y temperaturas, y en la investigación de procesos químicos y físicos a nivel atómico.
Ejemplos: Un ejemplo de uso de la espectroscopía de absorción de rayos X es el análisis de la estructura de nanopartículas de metales preciosos, donde se puede determinar la valencia y la coordinación de los átomos. Otro ejemplo es su aplicación en la investigación de materiales superconductores, donde se estudia la interacción entre electrones y la estructura cristalina para entender mejor sus propiedades eléctricas.