Descripción: La esteganografía es la práctica de ocultar información dentro de otro texto o datos no secretos, de tal manera que su existencia no sea evidente para un observador casual. A diferencia de la criptografía, que se centra en hacer que la información sea ilegible para aquellos que no tienen la clave, la esteganografía busca ocultar la propia existencia de la información. Esta técnica puede aplicarse a diversos tipos de datos, incluyendo imágenes, audio y texto, y se utiliza en una variedad de contextos, desde la protección de datos sensibles hasta la comunicación encubierta. Las características principales de la esteganografía incluyen la capacidad de ocultar información en medios aparentemente inocuos, la dificultad de detección y la posibilidad de combinarla con técnicas de cifrado para aumentar la seguridad. Su relevancia ha crecido en la era digital, donde la protección de la privacidad y la información confidencial es crucial, especialmente en el ámbito de la seguridad informática y la forense digital.
Historia: La esteganografía tiene raíces antiguas, con ejemplos que se remontan a la Grecia clásica, donde se utilizaban técnicas como la escritura sobre cera o el uso de tinta invisible. A lo largo de la historia, se han documentado diversas formas de esteganografía, incluyendo el uso de microdots durante la Segunda Guerra Mundial. Con el advenimiento de la era digital, la esteganografía ha evolucionado, adaptándose a nuevas tecnologías y medios de comunicación, como imágenes digitales y archivos de audio.
Usos: La esteganografía se utiliza en diversas aplicaciones, como la protección de información sensible, la comunicación encubierta entre activistas y disidentes, y la marca de agua digital en imágenes para proteger derechos de autor. También se emplea en el ámbito de la seguridad informática para ocultar datos dentro de archivos aparentemente inofensivos, lo que puede ser útil en pruebas de penetración y en la creación de redes de comunicación seguras.
Ejemplos: Un ejemplo práctico de esteganografía es ocultar un mensaje en una imagen digital, donde los bits menos significativos de los píxeles se modifican para incluir la información secreta. Otro caso es el uso de audio, donde se pueden insertar datos en las frecuencias que son inaudibles para el oído humano. Además, se han documentado casos de esteganografía en malware, donde los atacantes ocultan comandos o datos dentro de archivos legítimos para evadir la detección por parte de antivirus y sistemas de detección de intrusos.
