Descripción: La estrategia de zonificación es un enfoque de seguridad de red que organiza y segmenta diferentes áreas de una infraestructura digital para mejorar la protección contra ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS). Este método implica dividir la red en zonas específicas, cada una con sus propias políticas de seguridad y controles de acceso. Al segmentar la red, se limita la exposición de los recursos críticos y se facilita la identificación y mitigación de amenazas. La zonificación permite a las organizaciones implementar medidas de seguridad más efectivas, como firewalls, sistemas de detección de intrusos y balanceadores de carga, en cada zona, adaptando las defensas a las necesidades particulares de cada segmento. Además, esta estrategia ayuda a contener ataques DDoS, ya que un ataque dirigido a una zona específica no necesariamente comprometerá toda la red. En resumen, la estrategia de zonificación es fundamental para crear una arquitectura de red más resiliente y segura, permitiendo a las organizaciones gestionar mejor los riesgos asociados con las amenazas DDoS.
